Apocalipsis zombi: el ciudadano pacífico.

Amanece un día más, otro día cualquiera. Me asomo por la ventana solo para contemplar de nuevo las ruinas de un mundo que se fue a la mierda hace tiempo ya. Por las calles tan sólo transitan espejismos de personas, ni muertas ni vivas, cadáveres animados de miradas huecas. Zombis. Y aquí dentro yo solo, luchando día a día por no sucumbir. Me preparo para empezar la jornada. Pero cuando acudo al baño y me miro en el espejo no puedo evitar soltar un: jodeer! No hay duda... no estoy a salvo de la infección.

Consecuencias de confundir la Felicidad con el mirar a otro lado. 

Nos han inculcado tan profundamente el rechazo a la violencia. Nos lo hemos inculcado tanto a nosotros mismos. “La violencia nunca; no te enfades; no te quejes; tienes que aprender que las cosas son así; venga se bueno; nunca digas que no; tu dí sí a todo; no te quejes y aún da gracias de lo que tienes” y etc. y etc. Y el resultado es que se caen los velos pero seguimos zombificados, y sucede que nos roban, nos humillan, nos apalean, hasta nos dejan morir y seguimos zombificados. Y digo seguimos, porqué mira, cuando a los que robaban, humillaban, apaleaban y asesinaban estaban solamente en otras latitudes de este planeta ya estábamos zombificados, aún más: participábamos de la indecencia moral. Pero es que ahora nos está pasando a nosotros, a ti y a mi. Pero no, no te rebeles, que solamente vas a empeorar las cosas.

Evidentemente eso es lo que ellos quieren que creas. Y para adornar las manipulaciones de los poderes fácticos llegaron las nuevas hordas zombis del new age y de la espiritualidad castrante. No te enfades, no uses la violencia porqué claro... te vas a dañar a ti mismo, te alejas de lo divino, de la iluminación y.... en fin, frases de esas que huelen a perfume pero que cuando las ingieres saben a puro excremento.

Pero si es que hasta en el mismo Bhagavad Gita está bien claro, y así le habla Krishna a Arjuna en la batalla cuando éste duda en luchar y matar a sus familiares y amigos:

“31. Por esto, piensa en tu deber y no dudes. No hay mayor honor para un guerrero que

participar en una lucha por el restablecimiento de la virtud.

32. ¡Oh, Arjuna! Hay una batalla que ganar antes de que nos sean abiertas las puertas

del cielo. ¡Felices son aquéllos guerreros cuya actitud es participar en esa guerra!

33. Y no luchar por la justicia es traicionar tu deber y tu honor; es despreciar la virtud.”

No luches con odio hacia los injustos, lucha con amor hacia la justicia. No luches llevado por el miedo sino por la ilusión. No luches con el fin de causar dolor sino con el de traer la felicidad. Pero lucha, porqué es el momento de la lucha. El mundo de los sentidos es un juego, una obra de teatro y cada uno tenemos un papel que representar y sino lo representamos estamos fallando al designio del Uno. Y ahora es el momento de luchar, de salir y expulsar a las ratas que hemos dejado que nos hundan. Lucha sin apego al resultado de esa lucha, sin proyectar algo concreto para después. Si estamos abiertos y actuamos desde nuestro centro, una sociedad que refleje más la unidad que somos es posible. El anarquismo místico será posible.

Lo que no hay es error posible en el Cosmos, hagas lo que hagas estará bien. Todo es como debe ser. Pero... ¿no sientes el fuego creciendo en tu pecho? ¿no sientes que es la hora de purificar? Acepta todo tal como es, acepta el momento presente, acepta tu impulso de lucha, acepta el resultado de esa lucha sea el que sea.